sábado, 15 de agosto de 2009

Una perspectiva eterna

En la película El Gladiador, el General Máximo Décimo Meridio busca estimular a su caballería para que luche bien en la inminente batalla contra Germania. Dirigiéndose a sus tropas, las desafía a dar lo mejor de sí. Hace esta profunda declaración: "Lo que hacemos en la vida resuena en la eternidad".
Estas palabras provenientes de un líder militar de la ficción transmiten un poderoso concepto de particular importancia para los creyentes en Cristo. No estamos simplemente tomando tiempo y espacio sobre una roca que está flotando en el universo. Estamos aquí con la oportunidad de que nuestras vidas marquen una diferencia en la eternidad.
Jesús mismo dijo, "Acumulaos tesoros en el cielo, donde ni la polilla ni la herrumbre destruyen, y donde ladrones no penetran ni roban" (Mateo 6:20). Tener la perspectiva de vivir para la eternidad puede marcar toda la diferencia en este mundo.
¿Cómo podemos aprender a fijar nuestras mentes "en las cosas de arriba"? (Colosenses 3:2). Una buena manera de comenzar a hacerlo es descubrir lo que tiene más valor para nuestro Dios eterno. A través de la páginas de la Biblia, Él nos recuerda que valora a las personas por encima de las posesiones y a nuestro carácter por encima de nuestro desempeño. Esas son las verdades que perduran para siempre. Aceptarlas puede traer una perspectiva eterna a nuestro vivir diario.
(Tomado de Nuestro Pan Diario, año 2008-WEC.)

viernes, 7 de agosto de 2009

Los llamados a Enseñar /Jorge Enrique Díaz

Fuimos invitados por un Pastor Amigo, Víctor Bernales, para un seminario llamado "Los llamados a enseñar" dictado por Jorge Enríque Díaz, que es el actual director general de la Casa Bautista de Publicaciones/Editorial Mundo Hispano, casa editorial que se ha dedicado por más de 100 años a la preparación y difusión de recursos que ayudan a los creyentes de hoy y desde siempre a cumplir la Gran Comisión de nuestro Señor Jesucristo.
Tuvimos un tiempo maravilloso, no solamente de enseñanza, que fue realmente de mucha bendición, amena, clara, con detalles muy bien elaborados en la confección de lo que debe ser la enseñanza dentro de las iglesias, sino también cómo podemos reconocer si tenemos el don de la enseñanza en nosotros. Hubo un ambiente muy especial, ya que estuvo la participación alternada de dos grupos de música, que fueron de gran felicidad y gozo para los que pudimos asistir al evento. Un grupo era de un tremendo y maravilloso coro instrumental pentecóstal, con unas voces que desbordaban el lugar junto a sus variados instrumentos musicales. El otro grupo era coral, con unas voces que si no eran ángeles, estaban muy cerca. jejejjej hubo algunas interpretaciones que elevaron todo el lugar y Dios en su presencia estaba ahí, pues por supuesto Él era el primer protagonista de todo el evento que nos reunía, de eso tengo total convencimiento.

Les cuento esto porque, quiero presentar el capitulo Dos, del libro que estudiamos en el seminario, (que es el que está en la foto), que me pareció de mucha bendición y utilidad, como para también darlo a conocer aquí en este espacio, es sólo una pequeña parte de preguntas. De todos modos les recomiendo el libro completo, ya que es un libro muy bien diseñado y es una gran herramienta para usar.
y dice:

¿Tiene usted el don de enseñar?

Por eso te recomiendo que no dejes de usar esa capacidad (don, talento) especial que Dios te dio...(2 Timoteo 1:6 BPT)

Doce preguntas sencillas para saber dónde está usted.
En este capítulo deseamos cubrir uno de los temas más trascendentales y vitales para la vida de todo discípulo de Jesús: descubrir el don, talento o habilidad que Dios le dio para cumplir con su "Gran Compromiso" de hacer realidad "el gran Mandamiento" y "la gran Comisión" En este capitulo usted aprenderá cómo descubrir, desarrollar y dedicar su don o talento. También aprenderá cómo ayudar a otra persona en el proceso de hacerlo. Usted responderá a las preguntas: ¿Soy yo uno de los llamados a enseñar? Y, ¿Cómo puedo ayudar a los llamados a enseñar para que respondan afirmativamente?

Veamos primero las doce preguntas. Le aseguro que no hay respuestas buenas ni malas, son preguntas para reflexión y diálogo. (ya sea con sus Pastores, maestros de escuela dominical, etc.)

1.-¿Sabe lo que se espera de usted en la iglesia?
2.-¿Cuenta con el equipo y los materiales necesarios para hacer bien su tarea?
3.-¿Tiene la oportunidad de hacer cada día lo que mejor sabe hacer?
4.-¿Ha recibido elogios o reconocimiento en los últimos siete días por un trabajo bien hecho?
5.-¿Alguien en la iglesia muestra interés en usted como persona?
6.-¿Hay alguien en la iglesia que estimula su desarrollo como discípulo de Jesús?
7.-¿Siente usted que sus opiniones cuentan en la iglesia?
8.-¿La misión o el propósito de la iglesia le hacen sentir que su participación es importante?
9.-¿Observa que los líderes de la iglesia están comprometidos a hacer un trabajo de calidad?
10.-¿Es su mejor amigo(a) miembro de la iglesia?
11.-¿Alguien le ha hablado de su progreso como miembro activo de la iglesia en los últimos seis meses?
12.-¿Ha tenido oportunidades este último año de aprender y crecer en su trabajo de iglesia?

Estas preguntas están elaboradas para la reflexión, ellas nos conducen a ver la realidad de nuestra situación dentro de la iglesia de la cual formamos parte. Es un paso importante para luego poder ser guiados a desarrollar el don que Dios ha puesto en nuestras vidas para colaborar en La Iglesia.
Les dejo este enlace por si quieren averiguar más del libro y su autor. Espero sinceramente que esta entrada sea de mucha bendición para todos aquellos que buscan ardientemente estar comprometidos con la obra de Dios, buscando el modo de saber cuál es el don que Dios le ha dado para ejercerlo a Su servicio. Bendiciones para todos.